Scott ha defendido con éxito a clientes que se enfrentan a todo tipo de delitos, desde delitos menores hasta los delitos más graves. Él es inquebrantable en su compromiso de proporcionar la mejor defensa posible, adaptada a las necesidades únicas de cada cliente. 

Scott ha obtenido reconocimiento nacional por sus descubrimientos, que han dado lugar al mayor escándalo de informadores de la historia de Estados Unidos. También sacó a la luz fallos masivos en el registro de pruebas por parte de las fuerzas de seguridad del condado de Orange y reveló cómo un sistema de llamadas telefónicas a reclusos ampliamente utilizado permitía a la policía de varios condados acceder de forma secreta e ilegal a las llamadas entre reclusos y sus abogados. 

Scott estudió Historia en la Universidad de Wisconsin. Tras graduarse, Scott ingresó en la Facultad de Derecho de la Universidad Emory de Atlanta (Georgia). Fue Presidente del Colegio de Abogados, cofundador del programa de interés público y miembro de una de las revistas jurídicas de la facultad y de su equipo de tribunales simulados de derecho internacional. Poco después de terminar sus estudios, Scott se incorporó a una de las oficinas de abogados de oficio más destacadas del país. Durante su carrera en la Defensoría Pública del Condado de Orange, se ocupó de casos que iban desde delitos menores hasta homicidios en los que la fiscalía solicitaba la pena de muerte.

Scott ha presentado en conferencias estatales y nacionales sus investigaciones, técnicas para descubrir pruebas ocultas y métodos para responder a la mala conducta gubernamental.  

También ha estudiado español intensivamente en Centroamérica después de la facultad de Derecho, y una de sus pasiones constantes es leer y hablar el idioma. Scott se ha comunicado con clientes hispanohablantes y sus familias a lo largo de su carrera.